Ofrecemos aspectos a tener en cuenta para dar cuerda a las asambleas escolares. No son recetas, sino ayudas, un repertorio de lo que en algunas instituciones funcionó.
Como todo nuevo asunto, las asambleas necesitan ser presentadas, especialmente para que cada quién sepa de qué van y qué se espera de su participación.
Conviene anticipar también el mínimo indispensable de pautas para funcionar (sus pocas reglas de partida). Y, luego, elegir entre posibles disparadores para la conversación.
Vale también señalar algunas ideas sobre la función docente: esa persona que se hace responsable que la asamblea camine, destacando que la coordinación no es una técnica: es un oficio artesanal de intervenciones con fundamentos pedagógicos (y eso no se parametriza, pero se reflexiona).
Hay acciones institucionales que pueden, además, propiciar y desarrollar su funcionamiento. E ideas sobre la relación con las familias.